TRENT REZNOR ES UN «ONVRE»
Will you bite the hand that feeds…en una calle de París.
Así es amigos, a juzgar por la entrevista acerca del mundo del videojuego que le hicieron en Joystiq.com y en la que suelta perlas realmente jugosas; lean, lean…
Acerca de la industria del videojuego:
Estoy desilusionado. El sector está dedicado en cuerpo y alma a ofrecer cada vez mejores gráficos a costa de la jugabilidad, ofreciendo el mismo juego una y otra vez con diferente envoltorio.
Acerca de la diferencia entre los juegos del pasado y los actuales: Un juego como Robotron es el que marca la diferencia entre «onvres y ninios»
Acerca de las grandes compañías:Tenemos una idea para un juego, juvenil, tontorrón… pero es una idea demasiado arriegada para una compañía más interesada en sacar Spiderman 11 o el Madden del año. (Zas! en toda la boca)
Acerca del mundillo de desarrollo independiente: Me gustaría decir que desde la perspectiva del negocio musical, lo «indie» garantiza innovación pero por desgracia no es cierto. El mundo «indie» está tratando de convertirse en uno de los grandes: la gente que conozco en ese entorno tiene que lidiar con las mismas estructuras corporativas corruptas y rotas. Indie se supone que conlleva «una atmósfera creativa» pero por desgracia esto no es así.
Acerca de intentar crear personajes supuestamente reales con la tecnología actualmente disponible: Hay un juego que se llama Shadow Complex que luce «guay». Todas las «cutscenes» tienen los ojos muy bien renderizados… pero luego tienes ese horrible doblaje y esos personajes que parecen robots femeninos.
Acerca de la estrategia de Sony: No soy un gran fan de Sony. La estrategia detrás de la Playstation se basa antes en meter el Blu ray en su salón, antes que en la experiencia jugable. Y ahora tras tres años, sacan un controlador de movimientos que es un poco mejor que el de la Wii.
Acerca de Natal, Wand y el Wiimote: La fuerza de los controladores de movimientos surge cuando aparece una aplicación adecuada que te hace decir: «¡¡¡Joder, bien!!». Al final eso es lo que importa. Me alegro de que se haya innovado en ese campo y seguro que vemos cosas muy divertidas en el futuro, pero no creo que esta tecnología vaya a redefinir la manera en que jugamos en el futuro.
Como verán, suelta muchas cosas interesantes creando a su paso mucha tela que cortar y sobre la que debatir, pero como son ustedes unos vagos de mierda gente muy ocupada, seguro que no entrarán al trapo. Está hecho todo un flamer, el amigo. Se podrá estar de acuerdo con él o no, pero sin duda se nota que sabe de lo que habla y no como muchos otros. Especialmente sangrante es el caso de las Chicas Playboy, ya saben, esas que tienen nombres como Samantha o Natalie, y que vienen acompañadas de un cartel que reza: «Samantha es ingeniera agropecuaria» o «Rebbeca es astrofísica». Menudas desilusiones me he llevado yo tras levantarme al lado de ellas, pedirles que me expliquen algún teorema matemático complejo y descubrir que era todo una farsa ¿Lo comprenden? ¡¡UNA FARSA!!! ¡¡ES MENTIRA!!! ¡¡No tienen ni una etiqueta de Anis del Mono!!! Sé que esto que estoy contando es muy fuerte, pero creo que el mundo tenía que saberlo.