STEAM: CARTAS SOBRE LA MESA
He de confesar una cosa: estos días cuando me levanto, a las 6:30 de la mañana, me enchufo al Steam, y lo mismo al medio día en el curro. La razón: no perderme ni una de las votaciones de la comunidad. Aunque eso es mas bien un medio, el fin es hacerme con todas las malditas cartitas de la colección “Rebajas de verano 2013”. Y dado que me quedan 4 cartas pero sólo 3 día de ofertas, y que mediante ese método solo se puede conseguir una carta al día, aún si tuviera la suerte de que no me salieran repetidas o poder intercambiar éstas, no voy a conseguirlo.
A no ser claro que saliera alguna oferta interesante con la que me gastara en juegos esos 10€ con los que te “regalan” una carta extra… o pagara por ellas. Algo que me dije que no iba a hacer jamás cuando esto de las cartas estaba en Beta y a la cual preferí no apuntarme. Porque me conozco. Porque una cosa son las intenciones y otra las tentaciones. ¿Seré capaz de resistirme si al final solo me queda una para completar la colección? ¿De no pagar la cantidad irrisoria que se paga por una de estas cartas que en realidad no existen, que no sirven para nada? Aunque si finalmente pecara antes tendría que introducir dinero en la “Steam Wallet”, algo que sería la primera vez que hiciera.
Leyendo todas estas dudas e implicaciones: Compra de juegos que quizá no interesen comprar todavía (ese Skyrim me está llamando), exposición continua a las ofertas flash, introducir dinero en Steam Wallet (si ese dinero lo consigues mediante la venta de otra carta, entonces es que lo ha metido otra persona)… uno se da cuenta de que Gabe lo ha vuelto a hacer: una vuelta de tuerca más en nuestras ya exprimidas carteras y que sin embargo no nos duela. Sarna con gusto no pica.
Y no es que para lograrlo haya reinventado la rueda: las cromos han estado ahí desde que el mundo es mundo, o al menos desde que la mayoría de nosotros nacimos. La colección por la colección. Nada mas inútil que esos álbumes dedicados a la liga de fútbol, con frecuencia desfasados con respecto a los últimos fichajes. Mucho más útil las guías de Marca o Don Balón con muchísima mas y mas actualizada información. Y sin embargo sin su encanto. Algo en nuestro cerebro nos impulsa a coleccionar, ya sean cromos, dedales, postales, sellos, logros… y es por ello que aprovecharse de tal circunstancia era algo evidente y que sin embargo a nadie se le había ocurrido excepto a Gabe, que en un genial giro de guión liga esta nueva feature a sus ofertas veraniegas para cerrar el circulo en el que nos tiene atrapados.
Este año las rebajas han estado marcadas también por las contraofertas de Amazon, con precios ventajosos y cuyos juegos son registrables en Steam en la mayoría de ocasiones. Y yo me pregunto ¿Cuantas ventas se habrán realizado a sabiendas con un coste mayor en la tienda de Gabe con motivo de ese cromo por cada 10€ gastado? Algo que no tiene sentido ya que comprar directamente las cartas es más económico, o por el tema del nivel de experiencia de Steam, un sinsentido aun mayor.
Mejor que las tarjetas regalo del Corte Inglés para boda, bautizos, comuniones y funerales.
Hemos llegado a un punto en el que un juego sea registrable en Steam sea percibido como una ventaja frente a ese mismo juego DRM free. Y es que lo que empezó siendo una manera de tener disponible tu biblioteca de juegos en cualquier lugar con conexión ha ido creciendo gracias a la lista de amigos, los logros, los sombreros, las comunidades de juegos, el Workshop, Grennlight y ahora los cromos… en el punto de encuentro preferente donde se encuentran los jugadores de PC. Steam ha dejado de ser un lugar donde comprar y descargar juegos para convertirse en un juego en si mismo, uno en el que pasamos mas tiempo comprando que jugando según estadísticas de Valve, que aunque no sean muy fiables porque el que lo tenga abierto por defecto al arrancar el ordenador no quiere decir que este hojeando continuamente sus precios, es algo muy significativo. En PC ahora mismo Steam es EL juego, y todo lo demás son sus DLCs.