LA PASIÓN DE ESTE NIPÓN, UNA FRIKADA DEL COPÓN
Pero oye, como el hombre tiene los medios necesarios, cara de listo (fundamental) los conocimientos para meterle mano al Kinect, y mucha pasión por querer convertirse en una especie de Ultraman poligónico, ahí lo tienen. Cualquiera que lo vea pensará, pero qué vergüenza ajena da verlo. Pero no, amigos, ahí lo tienen, está disfrutando cual cochino en la perrera. Con sus posturitas, sus «magias» biónicas, sus poderes transgénicos. I lof dis guy.