HOY EN DÍA NOS REIMOS A BASE DE BIEN
Pero a base de bien, cuando cogemos un libro y nos enteramos que gente como Gengis Khan confiaba en gente que le adivinaba la vida… tirando huesos de pollo sobre los restos del té. Me pregunto qué pensarán de nosotros personas del futuro que vean como Obama y gente similar, escucha a gente entrajetada que pretende convencerle de lo mismo que los vendeburras convencían a Gengis Khan: Que conocían el futuro.
Porque en el fondo, esa gente no interpretaba una mierda. El objetivo del pollo era despistar. Lo que hacían era decir lo que a ellos les parecía. Llevaban huesos de pollo y cuencos de cerámica porque era de la tecnología más alta de la época. Ahora llevan I-Pads con gráficas que no entienden ni ellos. El día que se equivoquen y pongan la gráfica de ventas del Alpha Protocol nadie se dará cuenta. En Telecinco dirán que Irán tiene 200 000 cabezas nucleares repartidas por toda PS3 y que no se sabe cuántas pueden tener en Steam. ¿A quién le importa?.
El cerebro humano es muy sencillo. La gente a la que le importan los datos, porque tiene un cerebro capaz de procesarlos, como Sheldon, House o Sherlock Holmes, son gente rara que poco tiene que ver con un ser humano. El resto de gente solo quiere saber si Teherán es buena, o mala, quiere un término absoluto, no relativo, por supuesto, y que la excusa le sea creíble. Que salga en un I-Pad. Si me apuras, a alguno le vale todavía con los huesos de pollo.
El caso es que siempre hay gente que dice conocer el futuro. Al principio despistaban diciendo que tenían huesos de pollo. La vida era más fácil. De aquella seducías a una mujer diciéndole que podría comer casi todos los días. Como dejaron de creerles, ahora dicen que tienen “métodos”. Pero es imposible saber lo que va a pasar. Saber lo que va a pasar incluye la posibilidad de cambiarlo, lo cual dispara de nuevo exponencialmente un cojón las posibilidades, que de todas maneras eran ya infinitas.
Elucubrar a poco tiempo está bien. Hacer apuestas a 20 años es de idiotas. ¿Cuándo era hace 20 años?¿1991? en 1991 dices que Sonic y Mario iban a protagonizar juegos juntos y hasta tu madre se apunta a la paliza que te dan.
La mayoría de personas que tienen “métodos” suponen que el futuro será una versión cada vez más potente del mundo en el que vivimos. Si os fijáis en 2001, Odisea en el espacio, la idea que tenía Clarke del futuro era que habría grandes viajes espaciales y videollamadas. Pero eso sí, videollamadas en cabinas de 312 kilos con pantallas de tubo acopladas. Me encanta la vieja ciencia-ficción y el concepto que tenían del futuro. No era muy Desing-Thinkig. No sabían ni que eso existía. El futuro no existe hasta que no vas y lo haces.
Eso es aplicable sobre todo al mundo de los videojuegos. El mundo de los videojuegos puede hacer real lo que no existe. Pero para eso primero hay que soñarlo, y no es tan fácil. Que se lo pregunten a Zynga o a GameLoft. Es mucho más fácil cambiarle el color a Sonic, que es un tío que ya conocemos y sabemos que va bien.
El talento no es visionario. “Visionario” es lo que dice una persona que tiene la sensación de que el visionario de turno ha visto el futuro. No. Lo ha creado. Antes no lo había y ahora lo hay. Ha llegado antes que nadie porque hasta que no ha llegado no se podía llegar.
En su día, la gente esperaba de los videojuegos del futuro lo mismo que Clarke esperaba de la ciencia. Videojuegos en realidad virtual que te sumían totalmente… en mundos tridimensionales vectoriales que parecen sacados de una puta Famicom overclokeada.
¿Cómo hubiese sido un test de cómo van a ser los juegos del futuro?¿Que hubiésemos respondido en 1980 si nos hubiesen preguntado si el doblaje es una parte importante del videojuego?¿O sin en los 90 nos hubiesen preguntado que opinamos de jugar haciendo gestos delante de la pantalla?. ¿Y si hace 5 años me hubieran dicho que JJ podía jugar a los últimos lanzamientos en su PC, preocupándose de tener al menos 10 megas de banda para él solo, más que de tener una gráfica de 5 cifras de número de serie?
¿Y si te hubiesen dicho que ibas a comprarte montones de juegos del año y no ibas a tener más que cuatro cajas?. ¿Y si te dicen que mañana podrás jugar con la mente? Pues que sepas que en la gamelab de hará un par de años pusieron para probar un par de dispositivos que permitían controlar un ratón con la mente.
Primero quiero centrarme en la transformación del Hardware. Y el Hardware, señores, ha estudiado en la Hermandad Oscura. Todos esperaban que se hiciese Guerrero puro, 312 kilos de armadura, como he dicho, pero él prefiere las armas de mano. No hay realidad virtual, ni pesados armatostes como el guante ese de nintendo (bueno, la wii vende atrezzo a punta pala, para que parezca que es algo más que tu consola de siempre en tu viejo salón… pero también la industria del sex-shop y no le decimos nada.) O Gafas de realidad virtual…
Sin embargo, sí que hay aparatos que registran tus puntuaciones, las cuelgan en redes sociales, apuntan las de tus amigos, reconocen tu voz, recogen tus gestos, dentro de poco hasta tus pensamientos… Si te paras a pensarlo bien, esperábamos tecnologías con las que embutirnos en aparatos y que estos nos metiesen en realidades alternativas, y lo que tenemos son máquinas que, sin rozarnos, nos roban todos nuestros putos datos y nos meten en sus propios mundos. Son como jodidos psicópatas, me pregunto cuánto tardaremos en resultarles inútiles.
Pero el Software, como es lógico, también ha sufrido cambios. De Space Invaders a Halo, lo único que no ha cambiado es que defiendes la tierra contra los Aliens. A las transformaciones del Software las condiciona mucho el público. El público es realmente voluble. Y sin embargo, no hemos cambiado tanto. Pasan los años, y me vuelto a comprar un Yakuza aunque no tenga la PS3, echando de menos el kunio kun no nekketsu (streets gangs en España, más conocido como los muñecos cabezones de la NES que se dan de hostias) y miro a ver a qué juega JJ…y nah, ahí sigue, jugando al UFO del 94, al PRO (que por lo menos ha cambiado de año) y… poco más…
Innovar no es solo coger y sacar algo diferente, porque si no, la madre de Pocholo sería un genio. A la gente, muchas veces, no les gustan las cosas diferentes. Si no las saben controlar, ellos, que saben tanto de juegos, consideran que no está bien hecho. Realmente es difícil. Tienes que darle a la gente el mismo juego, el mismo puto juego al que llevan toda la vida jugando, el juego al que quieren jugar, pero a su vez, tiene que ser lo bastante diferente como para que suelte los dineros…
El avance de los juegos está marcadísimo por eso. Los juegos avanzan por ideas cortas. Te vas al mercado y tienes que sacar un diablo. Saca algo radicalmente diferente y la gente te dirá que por qué tiene ella que aprender a manejar nada, habiendo tantos diablos en el mercado.-En realidad aducirá tecnicismos que realmente no entiende y motivos de diseño que menos aun. Pero el motivo real es el otro – Saca un clon (probablemente peor) y tres cuartos. Al final, el secreto es: tienes que inventarte una o dos cosas que molen. Y si molan lo suficiente, nadie podrá sacar otro juego parecido sin ello.
Eso conforma dos cosas: para empezar, hay un 80% de jugabilidad que te viene impuesta, con muy poco margen de mejora, so pena de recibir fuertes varapalos de crítico y público. Y la segunda, que eso aumenta la brecha entre casuals y hardcores. Llegados a este punto, los juegos de gran sencillez se abren un hueco de nuevo, y de nuevo, joden a los putos analistas, a sus putos I-Pad y a sus huesos de pollo en el Café. Que por cierto, Patchter es el único de ellos que había acertado.