FIRMAS INVITADAS

Yatedigo de hardgame, el reportero más dicharachero a este lado del río tapanaki, desenfunda la katana en forma de pluma literaria con la que salvó a la animadora, al mundo y vaya usted a saber a cuántos planetas más incluída la segunda fundación y hace frente al divertido texto perpetrado por esta sin lugar a dudas «informada» literata. Que vayan a saber ustedes si es médica o jóvena, pero que sin lugar a dudas ha sabido llegarnos al alma de los más profundo de nuestros varoniles y tupidos escrotos de frikis irredentos, llenos de pelos, en los que escondemos los dados con los que jugamos al rol. Con «aiolreditoldya» les dejo.

Teclados y ratones vs Peinetas y Lunares.

La tontería , una antigua y consolidada forma de vida

A través de las eras y los tiempos el mundo ha cambiado, pero algunas cosas nunca cambian.

Estamos ante el supuesto Boom de la liberación femenina (“del” liberación femenina sería excesivo) y por supuesto este periodo de plenitud de lo personal por encima del género y los roles impuestos debería estar más allá de lo físico. Sin embargo tras años de lucha las mujeres siguen existiendo igual de sobre-preocupadas por su escaparate que hace cien años, más bien mucho más. Pero es que desde que los egipcios ya antaño usaran la cosmética tanto para ellos como para ellas, y tras un largo periodo de machotes de pelo en pecho y barba de dos meses, la esclavitud del mercado de la carne que parecía solo concretarse en el género femenino ha vuelto a imponerse entre el masculino. Caminamos pues de pleno en ese mundo vaticinado por Ewan Mcgregor en –Trainspotting- en ese momento trascendental de la secuencia de la discoteca que rezaba así:

“En el Futuro no habrá tíos ni tías, sólo Gilipollas”

L@s metro-sexuales van in crescendo, más motivados que nunca por un mundo en el que la superficialidad y la normalización/imposición de las modas es cada vez más importante para hacerse un hueco social. Estas victimas de la moda, adictos de las clínicas de estética y la silicona, de los “ciclos” en gimnasio y del cáncer de piel son los alegres y satisfechos artífices de las agresiones a su cuerpo más insanas, pero eso si, útiles para convertir el culto a la apariencia en su efímero credo antes de pasarse al Prozac en cuanto ronden los cuarenta.

Un/a metro-sexual sin moreno UVA todo el año, es como “Aquí hay Tomate” sin Isabel Pantoja. Y yo me pregunto… ¿Qué tienen esos espejos en los que se miran estas personas al levantarse? ¿Por qué nunca es suficiente? Misterios sin resolver.

Se pasan el día pensando si el bíceps está definido; si las caloría de una o dos ensaladas al día podrían compatibilizarse con un buen helado, si pasarse a la dieta macrobiótica o seguir sin cenar pero comer lo que les de la gana a la hora de almorzar. Hacen tendencias –véase disfrazarse como la payasa/o de moda más elegante a saber Victoria Beckham o Ana Obregón- . Inventan chismes que solo su “grupichi” es capaz de contestar con carcajadas: Cosas como “Viste que gorda se puso Maria”, “Julio está bueno pero se mete más coca de la comúnmente aceptada” o discusiones filosóficas sobre si Paula a sus treinta y pocos es estéril porque no tiene marido.

Existe un estereotipo físico para los metro-sexuales, sin duda. Y más te vale cumplirlo y variarlo al menos en las “primaveras del Corté Inglés” como mínimo para ser aceptado. Por lo general deberás estar tostado hasta casi ser negro, una vez de ébano artificial (ósea rojo) todo el año y por más horrible que pueda quedar una persona de color rojo con el pelo rubio no dudes en tintártelo una y otra vez hasta que lo quemes. No sufras, ayudarás al mercado de la cosmética comprando útiles productos para regenerar tu maltratado cabello tras horas y horas de peluquería.

Por supuesto la ropa para una persona “cool” ha de ser a la moda. Claro que si llevas unas cuantas operaciones de dermo-estética puedes ponerte los clásicos vaqueritos rotos y una mierda de camiseta anudada. Pero no olvides que lleve unos dibujitos hechos de diamantitos de bisutería, sutiles, pero que te den un toque de distinción, entre “Trasto y pija”.

Existen todo tipo de lugares en los que puedes obtener ropa para ser guay, pero como puedes perderte en el vulgar pero aceptado socialmente arte de ir a la última, mejor te compras el Men´s in Health o la Cosmopolitan y te dejas aconsejar por los que han pagado en publicidad en la revista para que les pongan por las nubes sus productos (VOGUE si te consideras más de la elite o MAN si aún te queda energía tras el gimnasio para hacerte pajas)

La gente así normalizada en la belleza, se sienten especialmente atraídos por coches caros en el caso de ser hombres y su sueño es hipotecarse en un descapotable para lucir moreno. Algunos más raritos les da por hacer surf colgado de una vela, si eres tan pijo que revientas es super cool aparentar un toque de bohemio y que te va la salvaje naturaleza con alguno deporte de riesgo, pero eso si, que requiera complementos que no se pueda permitir el mortal común, a ver si vas a parecer un cualquiera. En el caso de ellas se sienten atraídas especialmente por tarjetas de crédito sin límite de compras. Centros comerciales y probadores, sobre todo los probadores, da igual que no te acabe de gustar la prenda. Pruébate doce, te llevas seis y devuelves siete porque te ves gorda en casa.

Hay algo que todo súper normalizado tiene en común, y es la sonrisa Profident y las gafas de sol de marca, esta perfecta simbiosis entre máscara y ser humano cumplimentará la necesidad de ser aceptado socialmente. Recuerda American Beuty, “Para tener éxito es importante tener una imagen de éxito”, y si no sonríen un día no os preocupéis por ellos, no están tristes, es solo que se les olvidó blanquearse la dentadura. Otra cosa que tienen en común con la edad son los lifting y el botox, ya que la juventud se pervierte en estos individuos que acaban convirtiéndose en Liches de nivel 30, gracias frikis por definirlo así…

Su participación en sociedad es tremenda, se pasan el día hablando de su éxito y de lo que más éxito van a tener aún. Nunca hablan de operaciones chungas, ni de familiares enfermos o problemas. Sonríen aunque no haya que sonreír y por supuesto visitan restaurantes y lugares vacacionales de moda. Entendiendo como “moda” un lugar que aparentemente es “exclusivo” pero va todo cristo. Sus inclinaciones políticas son por supuesto ubër-capitalistas, aunque en realidad ellos no saben ni que es eso porque el libre-mercado lo conocen exclusivamente en la praxis.

Dentro de este contradictorio grupo de ários de color negro (por los rayos UVA) existen unos líderes cuyo palmito es muy superior al de los demás. No me refiero a ídolos de “masas” como Elsa Pataky alias “nunca me operé”, o la super super super simpática Anne Igatirburu que tiene una discreción y una clase que se la pisa o héroes de la radio-formula como Leo de OT “Que se pone a 100” y considerado el triunfito más sexy de 2006, por no volver siempre al mayor ecologista de la canción, David Bisbal, el calificativo se lo damos por reciclar el look calorro/garrulo en belleza y estilo de de nuevo “in”.

No, estos son sólo ejemplos escogidos al azar, Estos son líderes efímeros pues los verdaderos líderes de la cresta de la ola del mercado como forma de vida, son guapos y guapas anónimas. Discretos, que saben bien cuales son las mejores calas de Ibiza (pido perdón si ahora esta más de moda Formentera o Cerdeña) y si hablan de bolsa esquiando es sólo a través del móvil más absolutamente cool, con la postura adecuada y un toque de desdeñosa normalidad en forma de polo atado al cuello. Para provocar con una pizca de autenticidad vuelve a tus raíces.

Estos están exentos de todo acoso mediático, tienen la facilidad de ser como las figuras sin serlo. Y por supuesto tienen la capacidad de la VISA sin límites. Estudiados de cerca vemos que se convierten en adalides del consumismo, en avatares primeros del mercado de consumo al que todos quieren parecerse. Así pues la cadena de la economía de todas esas cosas tan “útiles” está servida, coches, perfumes, bisutería, complementos, joyas, ropa de lujo rebelde y ropa de calle a precio de lujo.

Por supuesto “El Ataque de los Clones” por parte de las capas más inferiores alimentarán lo suficiente el bolsillo de los primeros para que esta espiral del gusto por lo “útil” fomente más y más fiestas de sociedad, más sonrisas blancas en caras rojas y más trabajo para marujas/os reconvertidos en licenciados, aka “periodistas del corazón”

En realidad los Machos y Hembras Alpha no son mala gente. No es su intención generar ni envidia ni modas, pero el ego es también esclavo de la genética. Y son estos superseres hombres y mujeres como todos los demás que se adaptaron a la perfección al medio y se super-normalizaron como iconos de la sociedad de la apariencia y la compra-venta. Están orgullosos de ello, han peleado por ello, comprado y vendido por ello, sus almas también. Saben, a pies juntillas, que dominan al mundo. Lo que no saben es que su mundo los domina a ellos. (Con o sin ayuda ALIENI”J”ENA)

Así pues tengan cuidado con los ciclos, el exceso de ejercicio, la anorexia, la bulimia, los problemas de salud por operaciones de estética y las depresiones y decepciones de querer ser constantemente lo que no se puede ser. Las secuelas son irreversibles para tu cuerpo y tu hipoteca.

Sólo me queda decir pues, que ¡Ser Friki es mal de muchos, ver Televisión es tan estúpido como jugar a videojuegos; salir de compras a comprarme mil vestidos otra manera de jugar a rol!

El Friki al menos sabe conscientemente que es un imbecil porque ya se ocupan de decírselo las hordas de “alieniJenas” que somos los demás. Los super-normales no son conscientes sin embargo de su apego por los momentos perfectos de quince segundos en forma de anuncio de perfume, la tele es acunada como un aparato sencillo de usar y común, casi a veces pienso que debió de existir desde la concepción del mundo y el ordenador es un engendro del mal y por lo tanto para enfermos.

Sin embargo la vida sexual de Rebecca Loos al Friki medio no le interesa un pimiento sino es para vivirla en primera persona. Así pues me pregunto quien estará más enfermo.

Dios da pan a quien no tiene dientes. Amén.

Yatedigo.