Tras el pequeño gran descalabro de un título que prometía tanto como X Rebirth, aunque hay que reconocer que Egosoft se está poniendo las pilas y practicamente todos los días lanza un nuevo parche, uno se queda con el cuerpo un poco descompuesto, dubitativo y algo receloso ante otros títulos de la misma envergadura, sabiendo que son empresas pequeñas que quieren abarcar el universo entero.
Pero de pronto aparece un nuevo vídeo sobre el desarrollo de Elite: Dangerous conducido por Chris Gregory, director artístico del proyecto, y ve cosas buenas, bonitas, con esas técnicas de iluminación, desenfoques tan fantásticas, con esa vista desde la cabina tan estupenda, con esos cristales que se empañan, ese HUD, esos hologramas… y de nuevo recupera la esperanza en que un juego espacial de este calibre puede liarla parda. Mención aparte Star Citizen claro.