EL METAL GEAR QUE JAMÁS VIÓ LA LUZ DEL SOL
Corría el año del señor de 1987 y un jovenzano y apuesto diseñador de videojuegos Hideo Kojima, comenzó a diseñar un nuevo videojuego cuyo nombre sería, en principio, Metal Gear (Intruder). Con toda la ilusión del mundo, el muchachillo nipón presentó el videojuego a la gente jerifántica de Konami, y bueno el proyecto fue rechazado y marcado para siempre con una especie de sello rojo, letra nipona. A buen seguro Hideo soñó durante varios días con aquel sello. Pero claro, a quien se le ocurre hacerlo a boli y rotulador en un cuaderno. Vaya manera de presentar el proyecto.