BALADA TRISTE DE PSN STREET
Seguramente os habréis enterado de que la PSN lleva unos días caída, o mas bien cerrada, precisamente coincidiendo en unas fechas muy malas porque Semana Santa es una época de recogimiento y reflexión en la que a muchos nos hubiera gustado glorificar a nuestro Señor en nuestras cruzadas online. Pero no pudo ser, yo estoy personalmente muy cabreado porque llevo más de una semana sin poder entrar al Home y mi casa virtual está empezando a coger moho al igual que mi Playstation 3. Y si bien este corte de la conectividad de nuestra consola es irritante y ya de por sí merecería un post muy crítico, la gravedad de la causa de este corte es tal que deja pequeñas sus consecuencias en materia de ocio: Sony ha cerrado la PSN porque alguien se les ha colado hasta la cocina y ha robado nuestros datos personales y lo que es peor, nuestros datos bancarios. Por culpa de una cagada de Sony ahora somos nosotros los encargados de vigilar nuestras cuentas y afrontar las consecuencias de los posibles cargos fraudulentos que recibamos a partir de ahora. Se por experiencia (aunque no propia), que si recibiéramos algún cobro indebido, si lo denunciamos al banco al final el dinero se acaba recuperando, pero es al final de un camino largo, tortuoso y lleno de cabreos de los que Sony no se sentirá de ningún modo responsable porque:
Excluimos toda responsabilidad por pérdida de datos o acceso no autorizado en las cuentas Sony online Network y el daño causado a su software o hardware como consecuencia de usar o tener acceso a Sony Online Network.
Y por mucho que nos cabree ese mensaje no deberíamos sorprendernos, a fin de cuentas las grandes empresas son siempre muy pulcras en esto de lavarse las manos, y además ya se nos advertía de esto en las condiciones de uso de la PSN, esas que nadie lee porque no están pensadas para ser leídas por las personas a las que van dirigidas, sino para servir de escudo legal ante cualquier ataque de sentido común que le pudiera entrar a un juez:
13.LIMITATION OF LIABILITY
We have to throw in some more legal language we need to protect us so that we can provide you the benefits of the Sites. In no event will SCEA, its officers, directors, employees, shareholders, representatives or agents be liable to you for any direct, indirect, incidental, special, punitive or consequential damages whatsoever resulting from any (a) mistakes or inaccuracies of content on the Sites, (b) personal injury or property damage of any nature whatsoever resulting from your access to and use of the Sites, (c) any unauthorized access to or use of our secure servers or any and all non-secured personal information (d) any interruption or the cessation of transmission to or from the Sites, (e) any bugs, viruses, trojan horses or the like that may be transmitted to or through the Sites; or (f) any errors or omissions in any content or for any loss or damage of any kind incurred as a result of your use of any content posted, emailed, transmitted or made available via the Sites, whether based on warranty, contract, tort or any other legal theory and whether or not the company is advised of the possibility of such damages. This limitation of liability applies to the fullest extent permitted by law in the applicable jurisdiction.»
Y así es como están las cosas, puede ser que a Sony le caiga una multa a cargo de la ley de protección de datos y sus equivalente en otros países o puede que no. Pero de ese dinero no vamos a ver un duro, roben o no nuestro dinero. Como siempre vamos a tener que ser nosotros quienes velemos por nosotros mismos… y a raíz de esto me gustaría hacer algo de autocrítica, porque sí: Sony la ha cagado, es responsable moralmente de algo de lo que nunca lo será legalmente. Pero nosotros sabíamos que podía pasar y no hicimos nada por evitarlo a pesar de que sabemos que dar nuestros datos, especialmente los bancarios conlleva un riesgo inherente.
Al igual que el resto de la gente no me he leído la licencia de la PSN (el párrafo anterior lo he leído con posterioridad), y no se si te exige o no que metas tus datos personales verdaderos, pero el caso es que estoy seguro de que yo los he metido todos falsos, y es que sólo meto los auténticos en caso de tener que recibir correo postal o paquetes, lo cual, gracias a los maravillosos DLC, era algo que nunca iba a ocurrir en la PSN. Así que por favor, empecemos a tener algo de cuidado con nuestra información digital y la próxima vez que os registréis en un sitio, cualquier sitio, no deis más datos de los que os convenga.
Otra cosa que nos pueden haber chorizado son nuestros nombres de usuario y contraseñas. No tendría mayor importancia (siempre que cuando reactiven la PSN podamos acceder a nuestra cuenta y cambiarla) si no fuera por la tendencia de la gente de reutilizar ambos datos en infinidad de servicios Web: e-mails, tiendas online, redes sociales… Esto, por mucho que nos duela reconocerlo es fallo nuestro. No conozco a nadie que use la misma llave para la casa, el portal, el coche y el candado de la bici, y claro, si se nos pierde o hacen una copia todas nuestras propiedades están en peligro. Y sin embargo eso es lo que hacemos en el mundo digital. Vale, recordar múltiples contraseñas es un coñazo, pero es necesario, y ni siquiera es muy difícil si pensamos una manera de combinar una contraseña única con el nombre o URL del servicio al que estamos accediendo.
Una vez nos hemos dado nuestros correspondientes latigazos y hecho propósito de no pecar nunca más volvamos a dar caña a Sony que es lo divertido, y es que hay algo que no me queda claro… ¿para qué cojones querían nuestros datos personales? Los bancarios lo entiendo, pero los primeros sólo se me ocurre que deban usarlos a la hora de emitir una factura, factura que sabemos que vale menos que el papel en el que no está impresa pues Sony si por ella fuera no sería responsable ni de la propia Sony. Y hablando de datos bancarios, su uso es evidente, los querían porque así comprar algo en la PSN es cuestión de darle a un botón. Veo algo, lo quiero, doy a comprar y lo tengo. Lo he pagado pero no he entregado billetes, no he tecleado mi nº de tarjeta de crédito que siempre es algo que da miedo (y con razón), en definitiva no me he dado ni cuenta de la parte «negativa» de la transacción. Así la compra se convierte en algo fácil, cómodo y feliz. Justo lo que al vendedor le interesa. Así pues dado que nuestro subconsciente nos traiciona deberemos tomar también cartas en el asunto. Ignoro si en la PSN había un modo de que no recordara nuestro nº de tarjeta, pero es algo que deberíamos empezar a utilizar. Yo tengo activado ese modo en Steam, y compre lo que compre el momento de teclear los números de la tarjeta me da un tiempo de reflexión valiosísimo para saber si estoy haciendo una buena compra o es simplemente una compra impulsiva.
Admito que el modo «no recordar nº de tarjeta» no es la panacea y que en el caso del robo de datos no nos hubiera salvado de nada, por que aunque no nos la recuerde, seguro que Sony, y cuando digo Sony en realidad quiero decir cualquier empresa, la deja registrada en sus bases de datos. Lo que ya no tengo tan claro es si el resto de empresas usan un cifrado de estos datos sensibles tan endeble como el que usa Sony, ya que los primeros cargos indebidos están empezando a aparecer, y si hubieran cifrado los datos con un algoritmo medianamente decente ni usando el ordenador o red de ordenadores más potente del mundo hubieran podido descifrar los números tan rápido. No olvidemos que la PlayStation 3 fue hackeada porque la firma digital de sus juegos usaba un número aleatorio, si, pero que siempre era el mismo.
Por ello no está demás limitar al máximo las Web o servicios donde introducimos los números mágicos que dan acceso a nuestra billetera. Yo uso PayPal, no porque crea que sea más seguro que los demás, aunque espero que sí dado que la seguridad digital es su negocio, sino porque pagando a través de ellos evito introducir la tarjeta de crédito en webs de terceros. Admito que me gustaría dejar de depender de ellos después de la jugarreta que le hicieron a Wikilieaks, pero no he encontrado una plataforma mejor que la suya.
Y admitiendo esta dependencia llego al último punto que me gustaría destacar en este rage-post. Coincido con vosotros: lo grave es que nos pueden meter mano al bolsillo, pero que eso no nos haga olvidar que llevamos más de una semana sin poder jugar online. Y me cabrea mucho que teniendo una máquina cuya potencia era ciencia-ficción en 1995, esa máquina tenga menos conectividad que mi 486. Cierran la PSN y las capacidades online de la tecnología que iba a revolucionar el mundo del ocio digital se van a tomar por culo. Y todo por mantener un monopolio, por tener encerrado al usuario en su centro comercial donde todo lo que vea y compre pertenece a la misma empresa. En esto Microsoft no se distingue de Sony. Lo pagamos nosotros, pero es SU sistema, somos SUS usuarios, y se NOS follan cuando quieren. Dicen que el Live es mejor que la PSN, el primero es de pago y el segundo no (excepto su versión ampliada), pero eso que más da. Los usuarios que poseen los dos sistemas son minoría, muchos títulos son exclusivos, así pues tienen de facto un monopolio sobre las capacidades online de sus usuarios y de los desarrolladores. Sin competencia ¿Por qué habrían de mejorar?, ¿Por qué deberían bajar precios? ¿Por qué deberían esforzarse en reabrir la PSN cuanto antes si a los usuarios no les queda otra que tragar?
Que diferente es el mundo del PC, donde hay libertad de elección y si un sistema cae otros muchos quedan en pie. Tengo que reconocer que hace mucho que no juego a nada multijugador que no sea a través de Steam, pero hay muchos otros sistemas como por ejemplo Battlenet, aunque es cierto que ambos intentan también encerrarte en su ecosistema gracias a sus juegos exclusivos como puedan ser Team Fortress 2 o Starcraft 2, siempre cabe el recurso de utilizar juegos tan increíbles que permiten la conexión directa mediante IP sin necesidad de un servidor central, como el Age of Empires. Y aunque pueda parecer que en el PC también se dan prácticas monopolísticas como las citadas anteriormente en servicios como Steam o Battlenet, la diferencia con su contrapartida consolil es que éstos sí están presionados para mejorar. Steam empezó como una tienda online de videojuegos, pero la aparición de otras plataformas le obligó a evolucionar a lo que es ahora: tienda, ofertas, logros, amigos, chat normal y de voz… por tanto los principales beneficiados de esta sana competencia hemos sido los usuarios, y cuando ésta brilla por su ausencia nos convertirnos en ratones de laboratorio recorriendo una y otra vez los mismos pasillos de la PSN, el Live, y porque no decirlo del Steam que a pesar de todas las virtudes enumeradas también nos tiene bastante aunque no totalmente atrapados, pues los juegos comprados en él solamente puede ser jugados bajo su plataforma virtual.
Así que en definitiva: muy mal por parte de Sony que no solo se ha dejado robar nuestros datos informando de ello tarde, mal y con desgana. Esperando a después de la presentación de su tablet PC antes de confirmar que los números de tarjetas de crédito también estaban comprometidos, en un ejemplo más de que lo que les importa es el valor de sus acciones y no sus usuarios. Pero muy mal también por nuestra parte que nos hemos dejado encerrar en este laberinto, y ahora andamos gritando ¿Quién se ha llevado mi queso?, ¿Quién se ha llevado mi queso? cuando lo importante es que dejemos de ser ratones.