ANALIS-DIS: RAYMAN ORIGINS
Ubisoft no siempre fue la malvada compañía que es ahora, y parece que poco a poco va camino de dejar de serlo con su reciente renuncia a los DRM “Always Connected”. Cierto es que aún queda el tema de las activaciones, pero eso al menos es soportable y hasta comprensible si se tratara únicamente de evitar la piratería que se da durante la salida de los juegos. Aunque deberían anunciar una especie de caducidad de estas medidas al cabo de uno o dos años, o si no cuando queramos retrojugar dentro de un par de lustros al Assasins Creed 3 habrá que crackearlo aunque hubiéramos pasado por caja religiosamente.
Si cuento todo ésto es porque aunque Rayman Origins destaca por muchas cosas de las que posteriormente hablaré, para mí su mayor rareza ha sido la gestación de su versión de PC. Recordemos que nació siendo un título episódico exclusivo de consolas. El retorno a las 2D del personaje plataformero estrella de la compañía injustamente olvidado. Lo que comenzó siendo un proyecto de segunda fue cogiendo fuerza y acabó convirtiéndose en un juego completo por derecho propio. No es habitual estos cambios de planteamientos. Mas extraño aún fue que se decidiese su posterior lanzamiento en PC y lo completamente inesperado es que se hiciera sin NINGÚN tipo de DRM. Ninguno. Ni activaciones, ni CD-Checks, ni Steam, ni nada.
Premiar esta actitud fue lo que me hizo comprarlo de salida en su versión para compatibles aunque fuera mas barato en consolas. Y no me arrepiento porque la conversión es de una calidad inmejorable. Nada mas instalarlo desde su DVD (algo que llevaba años sin hacer), arrancó, se actualizó a la ultima versión y desde entonces el DVD está en su caja y yo jugándolo MUY FUERTE sin ningún problema o cuelgue. Con un rendimiento sólido como una roca inamovible incluso para Chris Redfield en un equipo que está desfasado, y que solo sobrevive porque lo indi suele tener bajos requerimiento y porque las consolas están mas atrasadas aún. Es triste pero en este mundo el que algo funcione como debe no es habitual. SI UBI SI GOOD.
Todo esto no sería mas que un brindis al Sol si luego resultara que el juego fuera una mierda, pero no es el caso. Para los recién llegados al mundillo y/o despistados antes hay que aclarar que Rayman es a Ubisoft como Mario para Nintendo o Sonic para Sega: su “mascota” mas reconocida a pesar de haber protagonizado sólo un plataformas en 2D y dos en 3D, para luego caer en el casualismo mas absoluto en la saga Rayman Raving Rabbids, con la que debo reconocer que he pasado buenos momentos en fiestas hogareñas. Rayman Origins representa por tanto una vuelta a los orígenes, valga la redundancia, un regreso al plataformas de scroll lateral, pero introduciendo como novedad su motor: UbiArt que básicamente permite que en lugar de percibir sprites, fondos y frames asistamos a una película de dibujos animados.
Excelente resumen de lo que Rayman Origins ofrece. Pero aparecen movimientos y fases que no he visto. ¿Quedaron en el tintero o son exclusivos del multiplayer?
Efectivamente lo primero que llama la atención del nuevo Rayman son sus gráficos y animaciones. Son sencillamente sublimes, es como si un batallón de dibujantes norcoreanos se hubiera colado en tu pantalla y estuvieran dibujando en exclusiva para ti. Si individualmente los gráficos y las animaciones ya son sorprendentes la integración de los mismos, es decir, como interactuan entre si los personajes con los enemigos, el escenario, el agua o el viento, proporciona la sensación de un todo cohesionado que no se da en el resto de juegos. Me explico: en los Mario o Sonic es fácil distinguir los elementos que componen las plataformas, son plantillas y bloques que unidos forman un camino, pero las juntas se siguen viendo. Los escenarios de Rayman parecen dibujados al vuelo dotándolos de una unidad que ni siquiera sabías que era tan importante hasta ahora que alguien te la ofrecido. Y por supuesto cada mundo tiene una o más temáticas exclusivas con sus correspondientes músicas acordes a la ambientación. Y os puedo asegurar que dada su calidad en el engine UbiArt no sólo han participado excelentes grafistas, también fantásticos compositores.
Ahí os dejo una lista de videos con la OST. Os aconsejo la nº 13, ambientada en la cocina mejicana, que me gusta tanto o más que el juego, pero no dejeis de escuchar la nº 3 que es la que suena en las persecuciones, o la nº 28 al mas puro estilo western. En realidad deberiais esucharlas todas.
Pero un cuadro por muy bonito que sea nunca será un buen videojuego, ni siquera será un juego. Le falta la interacción con el usuario, que es algo que también funciona a la perfección en Rayman Origins. Una cruceta o stick para dirigir y 3 botones para correr saltar y golpear es lo único que hace falta para realizar todas las proezas acrobáticas que veremos hacer a Rayman y sus amigos en las diferentes pantallas en las que se divide el mundo. La respuesta a los controles es excelente y de algún modo han conseguido que encadenar saltos de precisión con las diferentes habilidades que desbloquearemos resulte intuitivo, que no sencillo. Nunca tendremos es fatídica sensación de haber muerto por culpa del juego, siempre será debido a algún fallo por nuestra parte. Y dependiendo del grado de desafió que nos propongamos moriremos mucho. PREPARE TO DIE. Me explico: Rayman Origins es un juego bastante sencillo y asequible a cualquier jugador. Para empezar no hay límite de vidas y los checkpoints están muy próximos. Cualquiera podrá progresar hasta al menos el último mundo donde si no ha desarrollado la suficiente habilidad se estampará contra un muro de dificultad, y es que éste ultimo mundo toma mas de una idea de Super Meat Boy, y eso son palabras mayores.
Aunque no lo aparente este juego no es fácil, y aqui es donde vais a empezar a sufrir.
La polémica decisión de eliminar algo tan característico como el Game Over, y la relativa facilidad de las fases está justificada por las posibilidades multijugador del título. Hasta 4 personas pueden disfrutarlo a la vez, con el caos que eso conlleva. Lastima que el multiplayer sea únicamente local, algo que prometen remediar para la próxima entrega de la saga, Rayman Legends. Pero eso hace que el singleplayer quede algo descafeinado. Para evitarlo cada fase tiene 3 logros a obtener, y conseguirlos es el verdadero desafió al que se enfrenta el jugador individual, y no únicamente superar fases. Encontrar jaulas donde se encuentran encerrados los Electoons, recoger cierta cantidad de “Lums” y terminar el nivel de un tirón y a contrarreloj serán los auténticos retos para los que deseen algo mas desafiante. Y como premio a su tesón desbloquearan una fase especial en cada mundo consistente en la persecución de un equipaje con patas cual Equipaje de Mundodisco a toda velocidad por un recorrido en el que el más mínimo fallo provocará la muerte y la regreso al inicio. He de decir que estas fases son a la vez divertidísimas y frustrantes, rápidas cual juego de Sonic, pero sin sus automatismos, de hecho te hacen plantearte por qué los juegos de la mascota de Sega no son así. Y si atrapas los diez equipajes del juego desbloquearás la última fase cuya dificultad deja en pañales todo lo presentado hasta ese momento.
Hay veces que la cantidad de elementos en movimiento en pantalla es abrumadora.
Además de fases plataformeras hay otras dos mecánicas diferentes, una especie de shoot’em up a lomos de Moskito, personaje habitual de la saga. En ellas nos dejaremos las huellas dactilares si queremos conseguir suficientes Lums como para obtener la ansiada medalla, y las menos frecuentes batallas contra Bosses. Una vez mas Rayman brilla en este apartado, pues aunque pocas son todas muy imaginativas y variadas, el único pero que se les puede poner es que en ellas hay poco lugar para la improvisación. O haces lo que debes hacer en el momento justo o estás muerto, la victoria aunque satisfactoria viene dada inevitablemente por el ensayo – error – muerte – aprendizaje – victoria.
Las fases a bordo de Moskito lejos de ser uno de esos elementos desarrollados por terceros estudios y pegados cual pastiche están tan cuidadas como las demás.
Queda claro entonces que todo en Rayman Origins es maravilloso, se merece mas que un 10, UN 11. Pero va a ser que no, porque aunque mientras juegas todo te parece estupendo tienes la sensación de que falta algo que no terminas de saber lo que es. Yo tuve esa impresión, y comentándolo con mas gente no soy el único. Y se debe a que efectivamente falta algo: el componente aventura. Super Mario Bros es el Plataformas PURO. Yo crecí con Super Mario Bros. Pero Super Mario Bros 3 lo cambió todo, otorgó a las plataformas la libertad de un mundo abierto con diferentes caminos, power-ups que cambiaban la jugabilidad, fases llenas de zonas secretas y no meramente elementos escondidos al borde del camino principal. Super Mario World llevó la formula al extremo. Rayman Origins carece de esa libertad que te permite escoger tu propio camino y de la variedad antes mencionada.
Es por ello que a pesar de que Rayman Origins sea excelente, probablemente el mejor plataformas que ha aparecido en PC desde hace años, te quedas con la sensación agridulce de que podía haber sido mejor. Para muchos los juegos de plataformas son la esencia de los videojuegos, su mejor representante, y a pesar de ello sus lanzamientos AAA son escasos. Creo que se debe a que es un género en el que inevitablemente vas a ser comparado con los juegos de Mario, y no es fácil aceptar tal desafío. Es como ganar la medalla de plata, un logro impresionante que te deja algo triste durante un instante, pero al cual con el paso del tiempo otorgas su valor absoluto en lugar del relativo. Y en este caso el veredicto está muy claro: ES COJONUDO.
Nota 8 Ajares
Te gustará si:
– Quieres jugar a un buen plataformas AAA reciente sin comprar una consola de Nintendo.
– Tienes 4 mandos y 3 hijos.
– Quieres que salga Beyond Good & Evil 2
– Eres un dibujante norcoreano y quieres emigrar.
No te gustará si:
– No tienes corazón.
– Solo te gusta el arte abstracto.
– Roncas por las noches.
– Quieres seguir teniendo una compañía malvada a la que odiar.