AJAREPEDIA: T DE TARGET RENEGADE
Existen multitud de videojuegos donde la opción de cooperativo no es más que una forma de disfrazar lo que en realidad es una competición entre dos personas para conseguir más puntos y poder restregárselo por la cara al contrario. Esto sucede porque: o bien el objetivo final del juego no es tan atractivo como el recorrido que se hace para llegar a él, o es que existen multitud de pequeñas recompensas que propician la codicia del jugador. Cabal es un ejemplo de esto último, ya que, con suerte, tu compañero de juego dejará de meterte el dedo en el ojo el tiempo suficiente como para recoger las bonificaciones, las granadas y todo el armamento que haga falta. Entre los que se encuentran dentro de la primera categoría, Knights of the round logra que los jugadores cooperen porque al final de cada fase los pone delante de una bestia parda como jefe final.
Target Renegade es, por el contrario, el juego cooperativo por excelencia y lo es porque motiva al jugador a través de la venganza, usando el imaginario colectivo fermentado en multitud de películas baratas de los ´80 como elemento para que todos sepamos que no hay nada que mole más que romper costillas a toda una tropa de hijos de mil padres. Ciertamente, la necesidad adolescente de fantasear con situaciones donde el ego se satisface a través de la ley del más fuerte y las chicas enseñan las bragas en cuanto tienen ocasión, catapulta a un género: el beat them up a unos niveles de empatía emocional que rara vez se observan en otras obras supuestamente con una historia y un guión adulto detrás.
¿Existe algo más glorioso que fracturar cráneos con una maza de 10 kilos? Dúdolo, sobretodo si los melones que abres son los de unos macarras que se creen con derecho a decidir quién puede jugar en el parque y quién no.
A través de 4 niveles te dedicas a limpiar la ciudad de parásitos para poder enfrentarte a Mr. Big, el mal nacido que ha matado a tu hermano. Eso sí que es una motivación, mucho más que la socorrida damisela en apuros que en Double Dragon provocaba la sonrojante situación final en la que los dos aguerridos luchadores, después de haber combatido espalda contra espalda y haber creado un vínculo de unión más fuerte que el que se crea cuando escupes en la palma y le das la mano a un fulano para cerrar un trato, tienen que resignarse a que sea la mujer la que decida con quién se queda.
La ambientación de Target Renegade nos sitúa en una ciudad donde se respira muy mal rollito, así calentaremos nudillos en un parking de 4 plantas, una calle frecuentada por gente de mal vivir que pone estupefacientes en los batidos de cacao, el susodicho parque donde los ultrasur campan a sus anchas, otra calle y finalmente el bar, una última fase que juega con los misterios de la vida. ¿Acaso puede existir un lugar más sórdido, para una mente de 12 años, que un bar?
En nuestro descenso a las cloacas de la sociedad, podemos recoger cualquier arma que dejen caer los esbirros del gordo cabrón: martillos, bates, látigos y alguna más que resulta imposible distinguir debido a los adorables pixelacos del Amstrad CPC. Para cuando eso falle tenemos un amplio abanico de golpes, siendo los mas celebrados la patada a la entrepierna y el aplastamiento de traquea cuando el rival está en el suelo. Target Renegade posee la patada voladora original, aquella con la que flipabamos de nano, aquella que repetías en el colegio con lamentable resultado. Y el juego es consciente de que es un golpe supremo, por ello obliga a los jugadores mas empecinados en centrarse en ella, a dominar el resto de movimientos a partir de la penúltima pantalla, los enemigos se agachan esquivando nuestros mortíferos movimientos, ergo es hora de empezar a utilizar la cabeza, literalmente.
Musicalmente, Target Renegade aspira a hacer vivir al jugador la decadencia, la miseria y la degradación de su entorno a través de sintonías que nos sitúan inmediatamente en lo más crepuscular de un frío día de invierno. Los bips más melancólicamente perfectos de los 8 bits, porque, siendo sinceros, todos sabemos que la misión que nos espera es prácticamente imposible de cumplir, en ese sentido es puro no future, por eso funciona tan bien. Mucho mejor que una banda sonora centrada en géneros más duros como el rock o el heavy de calimocho.
Resulta sorprendente que el segundo nivel nos llegara intacto a nuestras pantallas, ya que en el los enemigos son fulanas, señoritas que fuman, furcias, busconas, pelanduscas, rameras, zorras, barraganas, golfas, cualesquiera, chicas de atasco, espatarradas, jineteras, servidoras del placer, trotonas, y sí, también hay alguna puta. Lo más peligroso de esta etapa son los chulos con pipa, un tiro significa una vida menos, así que conviene moverse constantemente y no es mala idea porque será el método para superar con eficacia el cuarto y quinto nivel, donde los enemigos ya nos rodean y acorralan como matones entrenados.
Si para un solo jugador la experiencia Target Renegade era intensa, para dos jugadores se convierte en un evento multifostiador de proporciones épicas que sólo se igualaría con el arcade WWF Superstars de Technos Japan (curiosamente los desarrolladores del primer Renegade y del Double Dragon 2) unos pocos años mas tarde. Visualmente representa justo lo que quería mostrar, con una buena elección de la paleta de colores y unas animaciones a gran nivel (siendo las de Spectrum mejores que las de CPC), sumado a unos escenarios (más detallados también en Spectrum) que con el tiempo serían lugar común de todas las recreativas de golpear y avanzar, dan para no sólo un clásico instantáneo sino para un gran juego que resiste la prueba del algodón tantos años después.
Que lagrimones me han caido al recordar este juego. Se hacia desear la carga del cassette en el Amstrad 464. Que p.. paciencia habia que tener. Aunque luego merecia la pena. Ains… que tiempos aquellos.
Magnifico blog, vaya tinglado teneis montado. Tremendos articulos. Aunque en este han pesado mas la nostalgia que otra cosa.
Un saludo 😉
Todo un detallazo el cartelito de GA en esa puerta :roll
Excelente radiografía de probablemente el primer título cooperativo que jugué y que no fuera el clásico 1up y 2up de un marcianitos. Buenos recuerdos, esa pantalla de carga casi me ha hecho soltar una lagrimita, de hecho he soltado media :love
DIOS este juego lo reventé y me lo guardé el el Microdrive…. sí yo tenía un Microdrive pal Spectrum. Con lo que valía uno de esos había que pensárselo, y mucho, lo que uno grababa en él. Pero el Renegade era gloria bendita.
Total, cuando el Microdrive ya no lo leía había que buscarse la vida. Es en ese momento cuando descubres que el medio de copia de seguridad más fiable, pero de lejos, pasándole los juegos a los colegas. Que se te jode el Microdrive, pues vas a casa del colega al que se lo pasaste, te lo copias y listo. Que a él se le ha jodido, pues vais los tres a casa del colega al que él se lo pasó. Se produce así un curioso efecto sociológico, en contra de cualquier intuición, que hace que un evento catastrófico como es no poder jugar al Renegade pueda convertirse en algo inolvidable si la casa donde la que acabas es la del tío cuya hermana se presentaba a Miss Pollensa.
Lo que te cuesta luego asimilar es el shock sociológico. Empiezas a trabajar en una oficina y resulta que los muy sacamantecas sólo hacen una copia, en lugar de muchas. Y en lugar de darle la cinta (qué paradoja, la cinta es el soporte de la copia de seguridad, no el lugar donde te llega el original) a la que está más buena de la oficina se la dan a un tío con un maletín que la guarda en un sitio por el que pagas una burrada porque es antiatómico y severosesual, pero que jamás has visto y nunca te molestarás en ver. Con lo que molaría ir a casa de la maciza a pedirle la cinta.
Estoy empeorando….
Yo tb lo jugue… y MUCHO, pq era el mejor juego de spectrum que tenia un colega mio, nos pasabamos las tardes pasandonos el puto juego, cosa que casi siempre conseguiamos, pero entonces volvías a empezar y no cambiaba nada… excepto el tiempo para pasarte la pantalla, que era muy escaso y era imposible de cumplir. Mr Green, es podria ser otro de tus retos: pasarte 2 veces seguidas el Target Renegade, si vives en Madrid, puedes contar con mi colaboracion como 2up
Ostras, que chungo era.
Y si te cogían por detrás te protegías la espalda y entonces sólo tenías que pegar patadas en los huevos, para las sitauciones más chungas.