Gods Will be Watching (GWBW)
Lo de este título es super-curioso, porque cuando normalmente nos quejamos de que los trailers o las demos no representan la esencia del juego final, GWBW se está llevando unos palos impresionantes en las reviews de Steam por ser exactamente lo que ya ofreció en su prototipo jugable que quedó en segundo lugar de la Ludum Dare 26. Así pues si te estás planteando su compra lo mejor que puedes hacer es probar dicho prototipo y decidir.
Para quien no tenga tiempo o prefiera leer mis tonterías le aclararé que GWBW es un puzzle disfrazado de aventura point & click con dilemas morales. Un puzzle en el que debes balancear unas variables ocultas como cuando intentas contentar a tu novia, mantener las amistades, aprobar los estudios y tener algo de tiempo para ti y tus videojuegos. Sabes que dedicar tiempo a una cosa hace que las demás se resientan, hay acciones que mas o menos apañan varias pero abusar de ellas produce desgaste como juntar amigos y novia, o novia y videojuegos, cosas incompatibles como salir hasta las mil con los colegas y estudiar al día siguiente, quizás haya que sacrificar una amistad a favor del ansiado polvo, etc. GWBW es lo mismo pero con situaciones a vida y muerte.
Pero aquí no es tan fácil como decidir a quien salvar, al chico a la chica, al niño o al adulto, aquí lo más probable es que mueran todos, incluido tu mismo.
Para quien considere que esto se le queda un poco cojo debe considerar que a lo visto en la Ludum Dare 26 se le añade un argumento bien hilado, apoyado por un mas que correcto comic precuela, que explica cómo en cada episodio acabas en esa clase de situaciones en las que brilla John Mclane. Unos gráficos con personalidad propia, hasta que el abuso de este estilismo nos repatee, y una música que te pone en tensión en un juego donde no hay ninguna cuenta atrás que nos fuerce a tomar decisiones precipitadas excepto nuestro miedo a cagarla. Porque un fallo, o una jugarreta del generador de números aleatorios significa… recomenzar el capítulo desde el principio.
GWBW es un juego difícil, de ensayo y error, incluye situaciones donde ganar o perder depende de un dado de siete caras, pero que no ha impedido que me pasara sus dos primeros capítulos al tercer o cuarto intento tras fijarme en las pistas que da para sus variables internas, cierto es que el resultado no ha sido plenamente satisfactorio, y haya algo de sangre derramada por el suelo, pero como dice Miles Vorkosigan: no hay plan que sobreviva al encuentro con el enemigo.
Soy consciente de que me dejo un aspecto bastante criticado en el tintero, pero dado que tiene que ver con elementos argumentales prefiero aplazar mi opinión sobre él hasta haber terminado el juego, cosa que estaría mas cerca de hacer… si tuviera Steam Cloud, fallo inesperado y un poco estúpido a mi parecer, por lo demás un juego único en su género, algo que pocos títulos pueden afirmar.
Lords of Xulima
Ha pasado mucho tiempo desde que salió el último RPG patrio, lejos queda ya el Demake de Skyrim, y es que es un género en el que da miedo meterse. Mucha competencia, títulos con presupuestos mayores que los del ministerio de sanidad, jugadores que se tiran 500 horas con el mismo juego a base de mods y que todo lo que dure menos de 100 les parece basura.
Pero hete aquí que un equipo soriano se lió la manta a la cabeza y con un par de crowdfundings y capital extranjero ha logrado parir un juego de Rol que auna clasicismo e innovación a partes iguales con unas ideas que implican que no hay decisión ni batalla de relleno o sin importancia.
Empezaremos creando los 5 compañeros, o aceptando el equipo por defecto, que acompañaran a Gaulen el explorador, eligiendo entre 9 profesiones y 9 dioses a los que adorar, así como sus armas iniciales, y os aseguro que este momento es fundamental.
Todas las profesiones parecen útiles y el grupo inevitablemente cojeará por algún lado. Además de que cada una de ellas tiene su habilidades propias, el oficio también influye en como de costoso es adquirirlas. Para un guerrero apenas cuesta un punto mejorar su habilidad en las diferentes clases de armas, pero a un clérigo le costará 2 puntos mejorar su habilidad en mazas, y hasta 4 puntos le costará a un mago mejorar el manejo de su bastón.
Fundamental es también escoger el tipo de arma, ya que además del daño normal cada clase está especializada en provocar hemorragias (que provoca daños cada turno), conmociones (que retrasa la acción del enemigo y disminuye su posibilidad de esquivarnos) o heridas (que disminuye la efectividad del contrario). También hay que tener en cuenta si es posible usarla desde la retaguardia, a o si a su vez es capaz de atacar a la retaguardia del grupo rival.
Una vez configurada nuestra invencible compañía es hora de adentrarnos en las tierras de Xulima, una especie de Valinor donde el dios de las Obras Golot nos convoca tras escuchar las plegarias de Gaulen, solo para descubrir que los señores de Xulima la han abandonado a su suerte y que si nuestro continente estaba mal, éste está fatal.
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Es aquí donde descubriremos las flaquezas de nuestro grupo, cuando muerda el polvo una y otra vez. El dios de los números aleatorios no está de nuestra parte, nuestros guerreros erraran su objetivo más de lo que ese 65% de acierto sugiere, y los dientes de una rata están el doble de afilados que nuestra inicial espada de latón. Aquí no valen victorias pírricas. Descansar para recuperar puntos de vida y magia cuesta comida, y la comida dinero. Y no es tan simple como en otros juegos porque la comida comprada no es acumulativa, es decir no vale comprar 7 raciones de un día para poder viajar una semana.
La ración de un día solo rellena hasta ése día. Es bastante realista el que la comida que aguante a la intemperie sin pudrirse sea bastante mas cara que la que no. Por otra parte la muerte de cualquier personaje de la compañía lo lastrará con penalizadores hasta descansar un día completo, por lo que no habrá deshonra en que alguien herido huya de la batalla confiando el devenir de la misma al resto de compañeros.
También desplazarnos vaciará nuestras alforjas, y aquí es donde Gaulen el explorador nos ayudará a que estas no se agoten demasiado rápido, especialmente en terreno difícil, y a encontrar comida y otras hierbas durante el camino. Otras habilidades no combativas como las de detectar y desactivar trampas o la de abrir cerraduras determinarán la dificultad del minijuego que hay que resolver para realizar dichas tareas, aunque hay un botón para hacerlo de manera automática.