ANALIS DIS FAR CRY 3 (PC)
Esto de los videojuegos va de, entre otras muchas cosas, ponerte en la piel de ciertos personajes; «moñecos» de carne, asesinos en serie, científicos con tendencias violentas, ciberpolicías nanoumentados, niños con subdepresión presos de un mundo de pesadilla, mercenarios, rebeldes… la lista es casi interminable y los «modelos» suelen repetirse de un título a otro. Así, nada diferencia prácticamente un personaje de un «Gears of War» de uno de los protagonistas de cualquier otro título bélico del palo, o a «Gordon Freeman» de cualquier otro héroe anónimo que tiene que salvar el mundo porque «estaba en el momento oportuno en el lugar inadecuado». Por ello, si algo hay que reconocerle a «Far Cry 3» es la originalidad en el planteamiento ya que por primera vez en la historia nos permite ponernos en la piel de un auténtico «tonto del culo-hijo de la gran puta-niñato de mierda».
Esto, al menos a mi, me ha generado a lo largo del juego varios problemas de tipo motivacional. Por un lado, ponerme en la piel de semejante cretino no me ayuda demasiado a la hora de meterme en el personaje (no porque yo no sea un cretino, si no porque no soy ESE tipo de cretino) y por otro porque resulta que el «objetivo» inicial del juego y lo que «supuestamente» te anima a seguir adelante (al menos en los compases iniciales) es rescatar a tus amigos de las garras de los malvados que los tiene presos. Y digo «supuestamente» porque lo que yo quiero es que se mueran. Todos. Empezando por la tonta del culo de mi novia y acabando por el idiota de mi hermano.
La historia de esta panda de memos se nos cuenta a través de unos flashback que el protagonista sufre a modo de alucinación cuando se mete unas drogas que se encuentra por ahí tiradas simplemente «‘CAUSE WHY THE FUCK NOT», y no es otra que la de unos niños mimados, drogadictos y con un cerebro más pequeño que un guisante que están de viaje por el mundo para «desbarrar»y «pasarlo superchupi» pero como no podía ser de otra manera acaban tocándole los «cojones» a quién no deben y son engañados para que visiten una isla en la que serán raptados por unos señores muy muy muy malos, momento en el que nuestro «prota» tras escapar, decidirá tomarse la justicia por su mano.
Puedo llegar a entender que este «Far Cry 3» tiene una segunda lectura (¿Un grupo de niños descerebrados «asaltando un país» que no es el suyo, tomándose la justicia por su mano, poniéndose ciegos de drogas, ayudando a quién quizá no lo merece y dejando una región aún peor de lo que estaba antes de su marcha? Me suena de algo) pero la presentación es tan zafia y la resolución tan mal traída (ninguno de sus dos finales tienen el más mínimo sentido) que sinceramente, si eso era lo que pretendían, no han sabido llevarlo a cabo de manera demasiado inteligente.
Pero bueno, Far Cry 3 es un juego y si el argumento o la historia están bien o te puedes identificar o no con semejante «Scum of the earth» sólo es un factor sin demasiada importancia y que en ningún caso afecta a sus mecánicas. A fin de cuentas, peor historia aún tiene «Just Cause 2» y maldita la falta que le hace.
Lo que pasa es que las mecánicas. ¡AY! Bien pero no maravillosas. No se llamen a engaño, el juego es muy entretenido, lo que pasa es que en Ubisoft lo tenían todo para que esto fuera un puto clásico y al final le dan 7 veces al palo y resulta que el partido no será recordado como memorable si no como uno más, porque pasados los años, casi nadie recuerda los partidos que acaban con un empate a uno.
El juego tiene claramente diferenciadas sus dos facetas, la de «mira un mundo abierto, haz lo que me salga de los cojones» y la «línea argumental que en realidad es un «Call of Duty» camuflado entre tanta vegetación.
Hasta aquí ningún problema, a la gente le gustan mucho los COD (incluso a mi antes de que la fórmula empezara a cansarme después de ocho iteraciones) de hecho me parece un planteamiento bastante inteligente sólo que no está bien rematado del todo.
Para empezar cuando el juego se juega como «Sandbox» se basa en las siguientes mecánicas;
– «Asaltar una base»
– «Subir a lo alto de una torre para activar una radio»
– «Cazar un animal con un arma específica»
– «Matar a un determinado fulano a cuchillo».
– «Llevar unos medicamentos hasta cierto sitio en un determinado periodo de tiempo».
– Buscar objetos coleccionables.
De todas ellas, la del cuchillo y la del asaltar campamentos son las más divertidas de llevar a cabo y son las que realmente salvan esta parte del juego, ya que el resto (en especial el tostón de las torres y la caza) no aportan nada realmente destacable en cuanto a mecánicas de juego se refiere.
El primer problema de Far Cry 3 (como también le pasaba a Deus Ex Human Revolution) es que todas esas acciones te dan una cantidad desmedida de puntos de experiencia (¡Y de chicles!), lo que hace que al final puedas escoger TODAS las opciones posibles de desarrollo de personaje (o del equipo que usa) reduciendo el factor rejugable que tan bien entendía el Deus Ex original en el que cada partida, acababa siendo completamente distinta a la anterior.
Pero esto, tampoco es un problema grave, si no otro tiro al larguero más.
Dónde yo creo que «Far Cry 3» fracasa y hace un «Sergio Ramos» mandando el balón a «CASADIOS» es en su aproximación al género «Sandbox».
Y es que hasta la fecha, Ubisoft han demostrado ser unos excelentes creadores de mundos y de ambientaciones, pero también realmente mediocres a la hora de «rellenar» esos mundos con contenido disfrutable. Sirvan los «Assassins Creed» (en especial el primero y a falta de probar la tercera parte) como demostración de este enunciado. Juegos preciosos, con unos valores de producción impresionantes que adolecen de lo que yo llamo «Sandboxitis» y ahora viene cuando yo les explico de qué va el rollo.
En mi opinión, lo que hace divertido un sandbox es lo siguiente:
– QUERER ES PODER: El juego ha de decirte siempre que SÍ. En un Sandbox un NO por respuesta no es una buena idea. Si quiero llegar ahí arriba, quiero poder hacerlo pero no tras media hora de insulsa caminata que no aporta nada (otro de los problemas del juego es que en ningún momento te sientes en verdadero peligro). FC3 tiene una manera muy curiosa de decirte que NO constantemente y está relacionada con la limitación de tu equipo; «NO puedes coger más flores porque necesitas una mochila más grande» «NO puedes coger más pieles» «NO puedes recolectar más dinero» «No puedes llevar más flechas» «NO puedes llevar más armas» «NO puedes llevar más granadas»; por un lado es cierto que te motiva a que mejores tu equipo, pero por otro no es menos cierto que corta el ritmo del juego y te obliga a irte hasta la otra punta de la isla a cazar un jabalí a escopetazos para mejorar la capacidad tu cartera. El problema es que una vez que has mejorado por completo tu equipo y has desbloqueado todas tus posibles habilidades ¿Te sientes más poderoso? Sólo relativamente. ¿Se traduce esto en un tratamiento más positivo por parte del juego de cara al jugador? NO. Primero porque la capacidad de tu inventario para llenarse de mierda inútil es como poco sorprendente haciendo que se te llene la mochila enseguida (Cosa que no sería un engorro si la gestión del inventario no fuera un auténtico HORROR) y segundo porque casi todas las mejoras están relacionadas en tu manera de afrontar el combate, pero no en cómo tu personaje se desplaza por la isla. Ahí están los *No abandones el área* y *No te puedes subir a este coche en marcha* para deprimir al jugador.
Cierto es que en el segundo acto, hacen aparición un par de elementos que mejoran tu forma de desplazarte por la isla SIEMPRE y cuando estemos en una posición elevada, de manera que funcionan de arriba a abajo pero nunca al contrario. Vale, barco y coche (y sus idénticos derivados) están bien, pero ¿Dónde está el poder saltar de uno a otro? ¿Dónde está mi puto Jetpack? ¿Y MI GANCHO?. ¿Y mis aviones con misiles nucleares? A Far Cry 3 le falta LOCURÓN por todos los lados.
–MAPA Y EXPLORACIÓN: Déjame pensar. Permíteme desactivar la puta flecha de los cojones. No quiero que me digas en todo momento DÓNDE tengo que ir. Más bien al contrario. Si hay un terreno enorme aprovecha la oportunidad para hacerme pensar y que tenga que mirar el mapa. Que tenga que buscar referencias. DEJA QUE ME PIERDA. Esa es la auténtica sensación de aventura que Dragon’s Dogma o Dark Souls entienden y Far Cry 3 no, la posibilidad de acabar con tus huesos en un estanque lleno de pirañas cuando tú lo que buscabas una cueva con tesoros. Porque en un Sandbox, explorar es divertido porque encuentras cosas muy locas independientemente de si van a ser visitadas o no y no en función de si tienes que recoger los trozos de Salami desperdigados por el mapa, cosa que por cierto en Far Cry 3 tampoco sucede.
– VARIEDAD VISUAL: No me aburras con la misma puta ambientación durante las 70 horas que dura el juego. Esto es algo que Skyrim entiende. O Fallout New Vegas, Sleeping Dogs por supuesto que sí yJust Cause 2 ni te cuento. Y no os doy la brasa con Red Dead Redemption y su sutil cambio de aires sin que casi te des cuenta, porque me entra la risa. Y por supuesto, sorpréndeme. No me metas 40 veces la misma cueva o la misma ruina maya. Y si puede ser un lugar que no salga en una misión principal MEJOR. Que el jugador encuentre de casualidad algo que no se esperaba le da riqueza al mundo, lo mantiene vivo, le da peso y credibilidad. Lo contrario, aburre a las vacas.
-SI ES UN SANDBOX, ES UN SANDBOX: Si estamos a setas estamos a setas y si estamos a Rolex estamos a Rolex ¿Qué mierda es eso de «No te salgas de la zona establecida» en las misiones principales del hilo argumental? ¿Cómo que no me puedo subir a aquella colina a campear con mi SNIPER? ¿Pero por qué me tienes que decir tú a mi cómo cojones solucionar la situación? ¿PERO QUE ES ESTO DE COGE ESTE LANZALLAMAS Y DISPARA DESDE AQUÍ? ¿Quieres dejar de decirme que NO todo el puto rato y dejarme a mi que solvente los problemas como me de la gana?.
Far Cry 3 sufre de «Sandboxitis» porque no tiene variedad visual alguna, no te deja usar el mapa, carece por completo de locurón, no tiene una exploración satisfactoria y no supone un reto para el jugador en casi ningún momento. Para colmo presume de ser adulto con los argumentos erróneos (¡¡MIRA, HAY TETAS Y DROGAS!!) con su campaña para un jugador mezcla churras con merinas violando las leyes del género muy fuerte y por el culo con cartelitos de «no puedes ir por aquí» y argumentalmente supone el viaje iniciático de un tonto hacia ninguna parte, la historia de un imbécil que no deja de serlo en ningún momento y cuando parece que va a dejar atrás su yo cateto, decide seguir siendo el mismo idiota de siempre. Far Cry 3 y esto es lo peor que se puede decir, no sorprende.
Pero para ser justos Far Cry 3 tampoco aburre. Más bien al contrario. Algo tendrá para haberme tenido 45 horas pegado a la pantalla. Y ese algo es un combate con unas armas que resultan ser todas muy satisfactorias (Rifles de francotirador con silenciador,¡¡Como enSIN!!) el toque de evolución del personaje (pese a que hagas lo que hagas siempre acabarás con el mismo tipo de personaje), misiones del hilo principal francamente emocionantes que son puro espectáculo gráfico, personajes secundarios COJONUDOS y diálogos bien escritos, momentos de gran belleza gráfica. Y tetas. Persecuciones a todo trapo. Animaciones en primera persona que te meten en el personaje todo lo que la línea argumental no permite. Y en definitiva un mundo coherente, menos alocado de lo que un servidor quisiera, más encorsetado de lo deseable, pero una experiencia divertida en última instancia.
Far Cry 3 viene a tu casa vistiendo una blusa con un escote tan grande que casi te permite ver la goma de sus bragas. Se sienta en tu sofá y te mira como si se fuera a comer LO INCOMIBLE (de J.A. BAJONA) y cuando te pones a su lado y empiezas a darle al tema, te detiene. «Traeme agua». Tú vuelves (por si acaso) con una garrafa de agua de 5 litros que prácticamente puedes sujetar con tu enhiesto pene y tratas de seguir a lo tuyo. «Por ahí no». «Por ahí tampoco». Al final, cuando se va, te lo has pasado bien, puede que incluso por momentos hayas acabado triunfando, pero no creo que vuelvas a llamarla, porque Far Cry 3 es, fundamentalmente, lo que viene siendo una calientapollas.