UNA INTERESANTE VISIÓN SOBRE KINECT Y EL AUTISMO INFANTIL
Ciertamente desde nuestro punto de vista, y dado el precio que tiene el aparatito, nuestro interés por Kinect en estos momentos es bastante escaso. Quizás en un futuro y si el software acompaña al hardware, lo cual lamentablemente dudo, podremos adentrarnos un poco más en sus posibilidades. Pero hoy nos vamos a acercar a otro punto de vista muy interesante, la historia de un padre (redactor de Gaming Nexus) y un hijo, al que le fue diagnosticado autismo, que por fin pueden jugar a un videojuego juntos (traductor de Google alehop!). En cuanto el aparato llega a casa el chaval siente interés por ello. Observa como Kinect capta sus movimientos. El redactor de la revista apunta que para el crío es muy complicado manejar un personaje videojueguil a través de los periféricos de cualquier consola, también a mí. Prueban Rally Ball, el chaval saltó, dió giros, agitó los brazos intentando golpear las pelotas que van siendo lanzadas al muñequito que maneja, no hizo falta explicarle que era lo que había que hacer. La respuesta también fue muy positiva cuando le pidió que navegara por los menús. El resto de la interesante historia en los enlaces. Chapeaú, me alegro mucho sin duda, pero yo no me lo compro.